Yolanda Díez. Concejal del PSE en el Ayuntamiento de Bilbao.
Cuando no es necesario nacer en Bilbao para sentirse bilbaína
Dice el viejo chiste que los bilbaínos nacemos donde queremos; este es el caso de Yolanda Díez que nació, creció y vivió en Eibar donde, desde bien pronto, estuvo en contacto con grupos y asociaciones afines al Partido socialista trabajando por solucionar los problemas de los barrios de su pueblo. Cuando llegó a Bilbao, los miembros de su partido la llamaron para entrar en las listas del Ayuntamiento donde lleva más de diez años como concejal viviendo y sintiendo nuestro botxo como una bilbaína más.
¿Cómo empiezas en política?
De entrada yo no soy nacida en Bilbao, aunque ya soy muy bilbaína ¿eh? (risas). Yo nací en Eibar, que es la cuna del socialismo vasco, vivía en un barrio obrero y mi relación con mis compañeros era la de no instalarnos en la cultura de la queja sino en el “qué vamos a hacer para arreglarlo” para solucionar cosas que pasaban en el barrio. De esta manera me empecé a relacionar con gente de la casa del pueblo de Eibar, entré a formar parte del comité local y así empecé a militar. A mí lo que me gustaba era lo orgánico, por lo que mi idea nunca fue tener un cargo institucional, hasta que vine a Bilbao, donde tenía mi trabajo en el hospital de Basurto y, en un momento dado, mis compañeros del ayuntamiento me propusieron ir en las listas municipales y, para mí, era un compromiso porque es un cargo muy importante pero al final acepté y aquí estoy desde 2007.
¿Es este el primer cargo institucional que has ejercido hasta ahora?
Sí, y creo que será eso y nada más, porque yo pienso que la política municipal es la más intensa y la más cercana, donde el contacto es más directo con las personas y con sus vidas, es algo que te impregna tanto que, a veces, no puedes desconectar. Al final estamos 24 horas con la política y por eso pienso que los concejales vivimos la política en su más alta dimensión.
¿Qué es lo que más te gusta de tu cargo de concejal?
Las personas; en mi opinión, un político al que no le gusten las personas o no tenga esa empatía con la gente, no puede ser concejal porque, para entender los problemas de las personas e intentar solucionarlos, eso es fundamental.
Todos los concejales destacáis la importancia de las personas como lo más bonito de vuestro trabajo pero, sin embargo, muchas veces son los ciudadanos los que no están tan a gusto con los políticos o con la política, por todo lo que ven a diario en la televisión o en los periódicos…
Es lógico ese desapego. Los políticos somos ciudadanos y a mí me indigna que haya gente con tan pocos principios y tan poca categoría personal para llegar donde han llegado algunos… y no me refiero a un político en particular. Lo que pasa es que a mí, mi partido y mi familia me han dado un código ético y procuro transmitirlo a mis hijos y a la gente que está a mi alrededor, procuro tener educación, ponerme en el lugar del otro… Muchas veces parece que los políticos somos personas infalibles y que estamos a otro nivel y eso no es así. Por otra parte, por todas esas cosas que pasan a diario y de las que me hablas, a menudo se tiende a meternos a todos los políticos en el mismo saco y eso me duele especialmente, porque es injusto y creo que hay gente que de verdad se cree lo que está haciendo y que vive la política como un servicio público; que alguien denoste tu trabajo por acciones de otras personas es injusto aunque te repito que entiendo que la gente esté enfadada y que, seguramente, yo estaría igual. De todas formas, en este ayuntamiento, que es lo que yo conozco, hay gente muy válida y muy diferente a esos políticos de los que hablamos.
¿Crees que el hecho de trabajar a pie de calle con un contacto directo con el ciudadano hace que los concejales seáis más “honestos” en ese sentido que los políticos de las altas esferas?
En mi vida particular soy muy correcta e intento tratar a la gente como a mí me gustaría que me trataran; así que en la política todavía más, porque entiendo que me debo a esos ciudadanos que, con sus votos, han depositado su confianza en mí, e incluso a los que no me han votado pero a los que también represento de alguna manera. No me considero modelo de nada, pero me gusta ser correcta con la gente. En cuanto a los que actúan de aquella manera, yo creo en la justicia, como es lógico; lo que pasa es que, a veces, esa justicia es más lenta de lo que deseamos. Pero confío en que a cada uno lo pondrán en su sitio y que estas cuestiones son reminiscencias de una forma de hacer política que, por suerte, está superada y que con los políticos que estamos ahora y con los que van a venir, no se van a repetir.
¿Cuáles son las prioridades de vuestro grupo para lo que queda de legislatura?
Sobre todo, culminar nuestro programa y que los ciudadanos de Bilbao tengan la mejor calidad de vida, buscando la cohesión social, que todos tengan trabajo y que tengan las mismas oportunidades; y, sobre todo, que haya equidad, que el que más lo necesite reciba más ayuda. También vamos a intentar que los barrios estén mejor, algo que los últimos años venimos haciendo no sólo en el gobierno, sino también desde la oposición, algo que creo que se nota.
¿Crees que, tal y como se afirma desde la oposición, existe una brecha entre el centro y los barrios?
Uno de nuestros lemas es que queremos una ciudad de portal más que una ciudad de postal, entendiendo que la ciudad es el conjunto de todos los barrios que componen Bilbao, tanto los barrios altos como el centro. En ese sentido, las inversiones que se han realizado en los barrios han sido enormes y cada vez se van acercando más entre unos y otros. Evidentemente, la ciudad siempre está en continua construcción, pero yo creo que se ha dado un salto cualitativo y de 15 años hasta aquí la ciudad es diferente, y ha mejorado en accesibilidad, movilidad y servicios. Si te das cuenta, Bilbao es una de las ciudades de España que más ascensores tiene y eso no era así hace diez años, no hay barrio que no tenga un ascensor o, por lo menos, uno en el que no esté proyectado ponerse uno. Creo que Bilbao se va cosiendo poco a poco y, en cinco o seis años, no voy a decir que Bilbao sea la ciudad perfecta, pero con todo lo que se está haciendo, va a ser una ciudad maravillosa para vivir.
¿Qué destacarías de nuestros barrios?
Lo que más me gusta de Bilbao es el orgullo que cada uno tiene por su barrio y eso quiere decir que se han construido barrios con entidad propia. Aunque ha habido épocas en que era más difícil vivir en nuestros barrios, ahora estamos más comunicados entre todos y lo bonito es ese orgullo de barrio que hay en cada uno de los bilbaínos y bilbaínas. Centrándonos en los barrios a los que va dirigido el periódico, ¿qué se puede decir de Santutxu, uno de los mejores barrios de Bilbao con un gran comercio?, Otxarkoaga, que es un barrio con mucha personalidad, con un gran movimiento asociativo y donde se vive muy bien, Txurdinaga, un barrio muy cómodo para vivir, en todos hay buenos centros de salud… son barrios que se están haciendo muy atractivos con los planes que se están llevando a cabo desde Viviendas para que la gente quiera vivir en ellos y donde el tema del transporte también ha sido muy importante, con la llegada del metro, algo que también ayudará a reactivar el comercio en esas zonas. Poder vivir, trabajar y divertirte en tu barrio es lo que todos queremos, y parece ser que es a lo que estamos volviendo.
Película: Te voy a decir la última que he visto, “Handia”, porque me ha gustado mucho y es para verla
Actor: Me encanta Javier Gutiérrez pero mis favoritos siempre han sido Anthony Hopkins y Jack Nicholson
Actriz: Me gusta Meryl Streep y me gusta también mucho Blanca Portillo, una actriz que hace todo bien.
Libro: “La nieta del señor Linh”
Escritor: Me gustan mucho Eduardo Mendoza y Julio Cortazar
Cantante y grupo musical: Ahora me gusta mucho la cantante francesa Zaz, y de grupos me gusta Vetusta Morla y siempre me ha encantado Triana.
Políticos: Yo creo que Ramón Rubial fue la persona más coherente entre vida y política que he conocido
Personaje histórico: Pues no te voy a decir uno en concreto porque, por ejemplo, todos los investigadores que han hecho que la vida de las personas en salud y en bienestar sea mejor, para mí son personajes históricos.
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