Patxi Cantera, Presidente de la Sociedad Deportiva Begoña, un club con 93 años de historia
“No haber podido formar un equipo femenino es una de las espinitas que se me van a quedar clavadas de mi época como presidente”
Este mes hemos hablado con Patxi Cantera, el presidente de la Sociedad Deportiva Begoña, uno de los equipos de fútbol con los que contamos en Santutxu. Lleva ya 24 años al frente de este proyecto y asegura que no lo dejará hasta que se jubile, dentro de un par de años. Lo que tiene claro es que antes de irse lo dejará en las mejores manos. Quiere que el trabajo hecho durante este tiempo continúe.
Es posible que a muchos de vosotros y vosotras os pase que al hablar del Begoña os venga a la mente la rivalidad que siempre ha existido con el Santutxu. Hace unas décadas los dos grupos se equiparaban en fuerza y en posición en la tabla, pero de unos años a esta parte, el Santutxu está un escalón por encima.“Antes no había tele, no había tecnología, los partidos del Begoña o del Santutxu eranel momento estelar de la semana en el barrio”.
La S.D. Begoña no se ha especializado en equipos inferiores, ya que empezaban en cadetes, mientras que el Santutxu lleva muchos años trabajando la base y, por lo tanto, tiene un mayor recorrido con más equipos.
A Patxi se le ve orgulloso hablando de su club: “antes en el Begoña se empezaba a jugar en cadetes, y la ambición de querer crecer nos llevó a trabajar la base hace unos pocos años. El problema es que no podemos crecer más por un problema de infraestructuras, y es que los campos de Maiona están ya repletos y no habría sitio donde entrenar. En este caso, podemos decir que quien antes crece, se acaba comiendo a los equipos de alrededor que se quedan pequeños. Por lo que trabajar la base también es una cuestión de supervivencia.” En este momento cuentan con 17 equipos, para los que tienen su espacio y sitio concretos.
Hace ya 4 años que crearon la escuela y tienen niños de 2011 y 2010 hasta los seniors. “Hasta ahora nos nutríamos fácilmente gracias a Maiona. Hay mucha población ymuchos niños que quieren jugar a fútbol. Por lo que en eso tenemos suerte, y luego, entre los que no quieren a unos y a otros, no tenemos problemas para sacar equipos. La pena es no poder dar cabida a todos los que quieren jugar”.
Su objetivo no es ganar
Patxi nos asegura que el objetivo del club y, también el suyo propio, no es ganar partidos sino que “los chavales lleguen a cadetes con unos conocimientos mínimos de fútbol”. Ya en esa categoría, que es cuando se empiezan a hacer las primeras cribas“poder tener jugadores con una mejor formación es lo que nos puede hacer crecer. Mi meta es que todos los chavales, al menos hasta edad cadete, puedan disfrutar de una formación adecuada para que adoren este deporte a partir de unos valores adecuados”.
Tiene muy claro que los niños no nacen aprendidos, por mucho que les guste este deporte, “no podemos decir que un chaval de 7 años no sabe jugar al fútbol o no vale. Hay que darles un tiempo, en el que además de aprender, se diviertan y ya se verá cuando tengan 14 años”.
Equipo femenino de fútbol
Vizcaya ya cuenta con algún equipo femenino sin embargo Patxi tiene esa “espinita clavada”. Asegura que le encantaría sacar grupo de chicas pero es imposible ya que “nos falta estructura en los vestuarios y porque tampoco pueden competir contra los chicos. Si hubiera equipos mixtos seguro, seguro que habría muchas niñas jugando”.
Son muchos años ya en el mundo del fútbol y Patxi sigue disfrutando mucho de los partidos. Lo bueno de esa experiencia es que ya no sufre tanto con los resultados, se lo toma de una forma más relajada y relativa, “no se acaba el mundo porque hayamos perdido una semana. En un club surgen problemas más gordos e importantes que ganar o perder. Y ahí es cuando lo pasas realmente mal, no con un resultado.”
“Si no hubiera gente como yo, no jugarían los niños, no habría equipos… Y si tu hijo entra en la escuela y llega a juveniles, al menos va a estar 10 años jugando a fútbol. Lo bonito es involucrarte en la educación de tu hijo o hija formando parte de una directiva, ayudando a los entrenadores jóvenes en lo que sea. No importa a qué te dedicas en tu trabajo, valen psicólogos, médicos, economistas, comerciales… Cada uno aporta lo que sabe y ésa es la forma de crecer como club, con la participación de todos”.
La subsintencia de un club local
Como la mayoría de los que nos implicamos en un club de barrio sabemos lo más complicado es conseguir dinero. Patxi nos cuenta que la S.D. Begoña “sobreviven con las cuotas de los críos y de varios comercios que nos ayudan con los carteles. Con la crisis empezó a desaparecer gente y como somos muchos clubes en la zona, los comercios y las empresas tampoco pueden darnos a todos. Entonces optan por no dar a ninguno. Y a los clubes nos está afectando mucho.”
La esencia del equipo
La plantilla con la que cuenta en el primer equipo es de barrio. Su esencia reside en eso, en la sencillez y en que todos dedican parte de su tiempo a sacar este proyecto adelante. “El portero es el pollero del mercado de la calle Julián Bolívar, Juan el del Rincón, Dueñas y su hermano que son del barrio de toda la vida, y eso es lo bonito. Este año estamos teniendo mala suerte, y no nos están acompañando los resultados, pero como tampoco podemos pagar a los jugadores, porque no tenemos presupuesto, tenemos que confiar en tener una buena camada de jugadores en alguna edad que den un aire fresco al equipo y den el relevo a los veteranos”.
“Tenemos un grupo que descendió de Liga Vasca y es el equipo que está ahora en tercera regional, ya que querían seguir jugando juntos. De esta forma tenemos dos equipos en regional para dar salida a los jugadores más jóvenes. Aunque la pena es no poder dar cabida a todos los que quieren seguir jugando”.
- La sociedad deportiva Begoña se creó en 1924, seis años después del Santutxu F.C. Durante los años de la guerra civil se vio obligado a parar su actividad.
- MAHATS HERRI (juvenil de segunda) – Se creó hace dos años para el cadete. La directiva es diferente a la del Begoña, con sus propios estatutos. Es un equipo vinculado que se creó para que los chavales no se fueran a la calle.
- El Begoña es una sociedad sin ánimo de lucro con 400 socios, de los que 280 son jugadores
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