Buenas luchas, malos referentes
Hace algunas semanas se hizo viral entre mis contactos una intervención de Bob Pop en el programa de Buenafuente. En ella Pop se felicitaba por los ideales de nuestra sociedad, pero se dolía por los pésimos referentes desde los que muchas veces elegimos defender esos ideales.
Este pasado mes de noviembre, Leticia Dolera ha vuelto a saltar a las portadas. Pero no por ninguna ocurrencia supuestamente provocadora, como las de los pasados Goya, sino por haber prescindido de la actriz Aina Clotet en su último rodaje por el mero hecho de estar ésta embarazada.
Ya habréis leído sobre la noticia en detalle, así que os ahorro el sabor a cartón piedra de las justificaciones de Dolera. Sólo diré que en muchas series y películas han logrado disimular embarazos más avanzados que los de Clotet con una sabia combinación de encuadres, ropas holgadas y, sobre todo, buena intención. Pero en este caso parece que faltaba, como mínimo, el último de estos ingredientes.
La dinámica capitalista ha pasado como una apisonadora sobre la dinámica feminista, y Leticia Dolera se ha mostrado como lo que realmente es: alguien que usa el feminismo como una imagen de marca gracias a la que vender libros sin ser escritora y dirigir series sin ser directora, en vez de luchar de forma activa por esa igualdad de la que tanto habla.
Como diríamos en latín vulgar, menos lirili y más lerele.
Pero yo no vengo aquí para echarle en cara nada a Dolera, sino para recordar que ella no es más que una persona individual que sólo se representa a sí misma. Los pecados de un individuo concreto no pueden invalidar la justicia del clamor del colectivo al que ese individuo dice representar.
Porque a Leticia Dolera nadie la ha nombrado portavoz de nada. Y porque, cuando una lucha es justa y su referente nos decepciona, lo sabio no es abandonar esa lucha. Sino que, simplemente, cambiar de referente.
@AbelAmutxategi www.comoescribirunlibro.com
¿SUBES O BAJAS?
El pasado 24 de noviembre se celebró en Bilbao el FairSaturday donde cultura y solidaridad se unen para crear una serie de eventos en los queAgalir Ediciones y la Asociación Sentimientos de Cristal estuvieron presentes. Visitamosel Café Iruña y convertimos su comedor en punto de encuentro aprovechando los testimonios de decenas de personas víctimas de abusos y maltratos y de sus familias recogidos en nuestro libro CARTAS CON REMITE DE MUJER Y… SILENCIOS DE HOMBRE. Con ello llevamos a cabo un taller en el quecolaboraron el cantante Inaki Uranga, los periodistas Alicia Romero y Asier Sánchez, la actriz Carmen Pardo, así como Marta de los Hoyos, Andrea Uña Barrientos, Soraya Pereña,Eva Marcos, Juanjo González…que leyeron fragmentos de cartas de mujeres y hombres. Creamos un ambiente único denunciando y reivindicando el vuelco que ha dedar nuestra sociedad para enfrentarse a un problema de tamaña envergadura. Aquel maremágnum de experienciasy lecturas fue el mejor caldo de cultivo para bajar todas las barreras y degustar verdaderas emociones vestidas conmás de una lágrima y alguna que otra sonrisa adornando el buen hacer delos que leyendo dieron voz a lo queotros, durante muchos años, han callado. Tras el acto nos pasamos toda la tarde de gestiones y por fin bajamos al centro y ahí vino la madre del cordero. Tuvimos que aparcar en el parking del Arenal, segunda plantay aldirigirnos al ascensor tocó esperar… 5, 10, 15 minutos… con nosotros una madre con un cochecitoy una niña encantadora, acompañados por la abuela de la niña,con un bastón y grandes dificultades para subir escaleras.El ascensor no responde ¿Qué pasa? … y seguimos esperando y sigue sin bajar. De repente ¡¡sorpresaaquí está!! “lleno” de 4 personas de unos 40 años. La madre de la niña pregunta con demasiada prudencia “¿entramos?” a lo que responden, sin mover una ceja siquiera… “no” y de repente me hierve la sangre y donde siempre callo y miro para otro lado cuando me toca a mí esperar, resulta que me da tanta rabia qué les digo “Oye ¿de verdad no vais a moveros?¿vais a dejar que esta mujer se quede otra vez aquí con su niña y su abuela? No fastidiéis, no podéis tener esa poca vergüenza” Resultado… la puerta se va cerrando, todos miran al suelo, salen para arriba y todos callaron. El día en que,en Bilbao,cultura y solidaridad se dan la mano nos pasamos todo por el forro y vendemos nuestra caridad por un plato de lentejas de goma. Sentí asco y vergüenza y probé una vez más el lado más hipócrita de esta sociedad,en la que, sin distingos de razas, colores o géneros existen “individuos” que suben las escaleras en ascensor para luego ir al gimnasio y estar pegados a una máquina que despierta sus músculos y anquilosa sus neuronas. De todo esto he sacado dos conclusiones:Me es más fácil luchar por los demás que por mí mismoy de nada valen los actos solidarios, los festivales, las fundaciones…si luego nos encontramos con nuestra propia miseria en el quicio de la puerta de un ascensor que, aunque marca que sube, solo recorre trayectos en pleno descenso.
Iñaki Urdangarin
Soy mediocre
Voy camino de cumplir 50 años y no me gusta lo que veo. Me preocupa instalarme en la mediocridad. A Super López, su padre adoptivo le invita a no destacar, a quedarse en la medianía, a evitar dar la cara para que no se la partan, a decir sí aunque sea no. En definitiva a no volar.
Vivimos aterrorizados, en silencio, cerrando puertas hacia fuera no vaya a ser que nos jodan la poca voluntad que nos va quedando. Fiando en un trabajo, -si lo tenemos-, que nos condena a cadena precaria sin revisión. Dejando todo en manos de los ansiolíticos, las redes sociales, el porno, el fútbol o la soledad sonora.
En realidad ya no participamos de nada. Lo reducimos todo a una cuantas rebeldías para descansar de nosotros mismos mientras ajenos a casi todo observamos el bochornoso reality show en el que estamos convirtiendo la vida. Sí, también ustedes. No haganculpable de lo que les sucede a Tele Pingo; la primera y última palabra la tiene su mando aunque se les haya olvidado cambiar de pilas.
Por que la cosa va de pilas. Nos hemos acostumbrado a aceptarlas de baja calidad, sin apenas autonomía y energía suficiente para ser eficientes, resolutivos y determinantes; es decir, honestamente íntegros. Tampoco responsabilicen a Mao y sus bazares chinos. Ellos lo tiene claro, me temo que ustedes no. Y es ahí donde radica el gran conflicto de la hemorroide mental que sufrimos. La misma que nos está conduciendo hacia lamediocridad absoluta. Complicado definirla cuando ya no sabemos distinguir lo que es un fascista, golpista, escupitajo, bufido o democracia. Creía que esta última permitiría entre otras cosas quitar el cerumen a la constitución, dejar de ser un voyeur servil delsistema, o limpiarnos los mocos sin ser juzgados.
Pues sí, me declaro mediocre por ser incapaz de optimizar proyectos profesionales innovadores, arriesgados y coherentes. Me declaro mediocre por confiar plenamente en mis convicciones, las mías, las que me pertenecen. Me confieso mediocre por practicar el pensamiento crítico como salvoconducto, por abandonarme a la creatividad para crecer a cachitos, por compartir y cohesionar la diversidad, por limpiar culos para llenar la nevera, por agradecer la generosidad de las personas de juventud acumulada, por no votar en las erecciones mentales de una clase política inmadura intelectualmente, por purgar mis errores con humildad, por retirarme con honor sin meter ruido, por pecar de ingenuo por soñador, por todo ello….
Me declaro mediocre, por mí y por todos aquellos que nunca dejaremos de volar.
Jokin González, Locutor de radio. Director y presentador del programa «Nunca serás tan joven» en Onda Vasca.
“A VECES HAY QUE MOLESTAR”
Cuando me propusieron escribir este artículo como firma invitada he de reconocer que fue una sorpresa (aunque también un reto, lo cual me motiva)., porque se me hacía raro que me pidiesen escribir en vez de cantar, así que me puse a pensar qué me apetecería contar a mí.
Y pensando me encontraba cuando, de repente, “EXPLOTÓ” del todo el fenómeno Rosalía; y digo del todo, porque para muchos nos era sobradamente conocida.
Resultaque, en estos últimos meses, no paro de oír y leer cosas que hacen referencia a esta artista, tanto a favor como en contra: quesi no sabe cantar Flamenco, que si es la nueva transgresora del género, que es la nueva ola del Flamenco, que si esta ahí por el marketing…Es lo que tienen las redes sociales, que todo el mundo se siente capacitado para opinar, aunque no tenga ni idea del asunto.
Yo, como cantaor flamenco, no voy a entrar a valorar si canta bien por Soleá o por Seguiriyas, o si lleva bien el compás de Bulerías o Alegrías…No lo haré, y la razón es que creo que no deberíamos quedarnos ahí, sino mirar un poco más allá.
Esta controversia,que desde siempre acompaña a cualquier artista que se haya acercado al flamenco con una mirada diferente, no es nueva.
Y no es por comparar a Rosalía con otros grandes artistas, porque aún le queda mucho camino por andar, pero lo de recibir críticas a su trabajo ya lo vivieron otros antes que ella. Cuando el gran Camarón de la Isla, publicó“La Leyenda del Tiempo”, contaba su productor, Ricardo Pachónque“mucha gente devolvía el disco, porque decía que aquél no era Camarón”,y resulta que, con el paso del tiempo, ha llegado a ser uno de los discos más importantes de la historia del Flamenco, yelegido por la revista ROCKDELUX como el segundo mejor álbum español del Siglo XX; o cuando el maestro Enrique Morente,publicóen el 96 el disco OMEGA, con Lagartija Nick, abriendo el camino a nuevas fusiones con géneros musicales antes impensables, y que permitieron acercar el flamenco a otros públicos.
Pero no solo ellos lo hicieron.Anteriormente, Marchena,que revolucionó el género, con una nueva forma de cantar, creandoincluso nuevos “palos”, como la colombiana,también fue muy discutido y lo sigue siendotodavía en ciertos ambientes puristas.
La realidad es que todas estas aportaciones han hecho del Flamenco un géneromás rico. Por ejemplo, nadie se cuestiona ahora la presencia de un instrumento como el Cajón en un cuadro flamenco y, sin embargo, solo lleva con nosotros desde finales de los años 70, cuando el Maestro Paco de Lucia lo introdujo en este género tras conocerlo en Perú.
Y así, podríamos escribir páginas y páginas,pero seguramente que todas nos llevarían al mismo sitio, y es que, la MÚSICA es un arte de transmisión, y si hay alguien que estállegando a tanta gente, será porque algo tiene.
Que cada uno disfrute del Flamenco que más le guste, dentro de este arte de siglos y que el tiempo dé y quite razones y, sobre todo, dejemos que haya valientes que se atrevan a arriesgar, porque si no, nunca sabremos hasta dónde podremos llegar.
Y como dijo Enrique Morente“Muchas veces también se hacen cosas para molestar, porque molestar, muchas veces es muy necesario”, y gracias a gente como este genio se ha conseguido evolucionar este Arte.
Un saludo muy Flamenco. Juanjo Navas. Cantaor flamenco de Otxarkoaga
YO SOY DE OTXAR ETA ZER
Una de mis pasiones, y en la que dedico mi tiempo de ocio y a la vez de compromiso por el barrio es dentro de la Asociación TENDEL. Una entidad que llevamos 20 años trabajando en la educación no formal en el barrio de Otxarkoaga.
El año pasado Tendel participio en un estudio de la fundación “PERE TARRES” de la Universidad Barcelona. El objeto de estudio era ver si las prácticas informales y la participación en actividades de tiempo libre, como el voluntariado, se identifican como elementos de prevención ante la exclusión
El estudio constata que los barrios como Otxarkoaga donde la mayoría de la población tiene origines diversos, la entradas en este tipo de entidades como Tendel o la participación de los niños en actividades deportivas o sociales implican un sentimiento de pertenencia y es el espacio idóneo y relajado donde poder trabajar aspectos relacionados como la prevención de conductas negativas o consumo de tóxicos.
En la misma línea, las relaciones que se producen en estos espacios, las relaciones de amistad, son relaciones más profundas, que general mayor compromiso interpersonal y de confianza
Otro de los grandes beneficios de participar en estas actividades es que los jóvenes que han pasado por estas son más conscientes de las necesidades de su barrio y de las responsabilidades que hay que tomar para mejorar el entorno
Que es lo que quiero decir con todo esto, pues que como nos dice el estudio, necesitamos unas entidades sociales, deportivas fuertes en el barrio. Otxarkoaga siempre ha sido modelo en este aspecto. Tenemos que lograr que nuestros jóvenes participen en las mismas, ya no solo por el crecimiento personal que supone, sino por la dimisión social que tiene en el barrio
KERMAN OLIVA
NO SON LAS BICICLETAS
Desde que se implantaron las nuevas bicicletas eléctricas del Ayuntamiento de Bilbao no paro de ver en las redes sociales quejas sobre unidades extraviadas, estropeadas, mal usadas… De hecho, yo mismo encontré una abandonada cerca de nuestra oficina y llamé a Bilbao Bizi para dar parte de ello. Al cabo de un par de horas seguía allí por lo que decidí ser un buen ciudadano y llevarla al aparcamiento de bicis sito en la calle Karmelo y, por qué no decirlo, aprovechar para probarla en esos escasos 500 metros. Y la verdad es que funcionan, y muy bien. Hacía más de 20 años que no montaba en bici y no me costó nada. Pedaleaba con miedo pensando en que me iba a tener que bajar para subir la cuesta de Menéndez Pelayo pero hete aquí mi sorpresa cuando la subí con apenas un poco más de esfuerzo que llaneando.
El problema, estimado convecinos, no son las bicicletas, son los gamberros, incívicos, insolidarios y descerebrados autóctonos y foráneos. Que hay que endurecer el sistema, puede ser. Que hay que pedir más garantías a los usuarios, puede ser. Que hay que controlar más el servicio, puede ser. Pero no podemos querer ser una ciudad de vanguardia, de progreso y puntera sin servicios punteros, innovadores y de vanguardia. Y este sistema lo es, y un servidor poco sospechoso de deportista, está decidido a usarlo y creo que con el tiempo será muy beneficioso para la villa y sus villanos y villanas. Felicito al Teniente de Alcalde Alfonso Gil y por ende al Alcalde Aburto por su valentía.
J. A. MEDINA
Fina eta Manu, beti zuekin!!!
Este mes me gustaría haber podido hablar de algo bueno y acabar el año de una manera positiva, pero la verdad es que la actualidad y esta mierda de sociedad no dan tregua y es complicado ver algo que no nos haga vomitar.
Podría hablar de la llegada de la ultraderecha a las instituciones, apoyada en el auge de las ideas fascistas y de la capacidad del partido que las representa para que sus mensajes xenófobos, machistas y totalitarios calen en una sociedad ignorante y atontada, y por supuesto no me refiero a los andaluces, que es por donde se ha empezado a extender “la plaga”, sino a ese sector de la sociedad española que da más importancia a su trapo que a un plato de comida.
Podría hablar de un impresentable malnacido, director de un colegio donde se ha demostrado que otro malnacido estuvo durante años abusando de sus alumnos, y podría hablar de que dicho director defiende a capa y espada a ese pederasta, mientras el colegio sigue recibiendo subvenciones a pesar de pertenecer a una secta como el Opus Dei.
Podría también contar que ya no existe “el oasis vasco” y que, por fin, sale a la luz que aquí en Euskadi también hay corrupción y que hay partidos políticos que, al igual que otros, han actuado como organizaciones criminales, robando millones y adjudicando a dedo obras y puestos de trabajo.
También podría hablar de que los chavales de Altsasu siguen en la cárcel, de que en este mes siguen asesinando a mujeres, mientras los asesinos siguen campando a sus anchas pertrechados tras una justicia machista y asesina… podría hablar de tantas cosas, y ninguna buena…
Pero de lo que sí quiero hablar es de la grandísima injusticia cometida con unos padres a los que, ya hace más de seis años y en un callejón del centro de Bilbao, arrebataron la vida cuando unos agentes de la ertzaintza asesinaron a su hijo. Por si eso no fuera bastante, estos padres tienen que ver ahora como esta justicia basura que tenemos da la razón a los asesinos, con una sentencia de mierda en el que sólo se condena a dos años de cárcel a uno de los mandos que, precisamente fue el único que se negó a disparar y que, casualmente, ya está jubilado, por lo cual nadie entrará en prisión y nadie pagará por este crimen. Ante tal desfachatez, poco se puede hacer, aparte de arropar y apoyar a Fina y Manu, dos padres que no se merecen todo lo que están pasando, pero que pueden dormir tranquilos porque la gente que de verdad importa sabe de sobra cuál es la verdad y seguirá reclamando justicia para Iñigo en las calles.
Fina eta Manu beti zuekin!!!
SERGIO IGLESIAS
…Porque tú lo vales
“No sé si voy a poder…me da miedo que todo el mundo descubra que soy un farsante y que no merezco ese puesto” me decía el otro día una persona brillante, con una gran capacidad de trabajo y que acababa de ser ascendido a un puesto de responsabilidad tras años de duro esfuerzo en su empresa. Y por supuesto que no es un farsante, está en su nuevo puesto por méritos propios pero como muchas otras personas achaca sus logros a “la suerte” ya que una baja confianza en sí mismo le impide ver su capacidad de esfuerzo y su valía.
El Síndrome del Impostor no está tipificado en los Manuales Diagnósticos pero afecta a un alto porcentaje de la población, es el fenómeno psicológico que impide a algunas personas aceptar sus logros ya que piensan que no son merecedores de ellos. Tienden a sentirse agotados, angustiados, estresados y con mucho miedo a fallar y no alcanzar sus objetivos. Viven con el miedo a que les descubran y se sienten muy vulnerables. Todo ello les puede llevar a autoexigirse y buscar constantemente la perfección, pudiendo ser rígidos de carácter e incluso hostiles.
Pero todo lo anterior no sucede sólo en el terreno laboral, nos referimos también a esas personas que en su día a día tienen dificultad para reconocer sus capacidades, les cuesta aceptar elogios o cumplidos y no sólo no celebran sus logros sino que tienden a infravalorarlos y restarles importancia, explicándolos en muchos casos, como decía antes, desde la suerte y no desde su voluntad y empeño.
Cuando achacamos nuestros éxitos a causas externas nunca nos sentimos dueños de ellos y eso no hace más que acrecentar la falta de seguridad en nosotros mismos y en nuestra capacidad para conseguir lo que nos proponemos, no olvidemos que la suerte, el azar o la opinión de los demás nunca va a ser algo que podamos controlar y eso nos va a llevar a sentirnos más vulnerables.
Para intentar mejorar esta dificultad puede resultar positivo empezar por aceptar los cumplidos, no rechazándolos nunca, hacer un listado de nuestras competencias y habilidades y ante los logros priorizar la idea de que nuestros esfuerzos nos hacen merecedores de ellos y no dejarlos en manos de la suerte o del momento que nos toca vivir.
Cambiemos el “no me lo merezco” por “me lo he ganado” y aprendamos a valorarnos y porqué no, a felicitarnos por cada pequeña cosa que conseguimos gracias a nuestro empeño y sacrificio, a no achacarlo a la suerte sino al “Porque yo lo valgo”.
Silvia Iglesias Psicóloga Sanitaria y Mediadora Familiar silviaimu@hotmail.com
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